Requerimientos hídricos cultivo de arándanos

El arándano es un planta de raíces muy superficiales, ya que la mayor parte del volumen radical esta en los primeros 60 cms. de profundidad. Lo anterior hace que la sequía afecte negativamente su crecimiento y producción.
Los vaticilium requieren de suelos húmedos con un buen drenaje, pero con suficiente humedad superficial durante el verano, aunque en el periodo de crecimiento la napa no debe subir los 40 cms. Un suelo rico en materia orgánica retiene el agua suficientemente como para prevenir la deshidratación ( GODOY, 1984)
El arandano es de los frutales de fruta pequeña mas sensibles al estrés por sequía (HALL, 1978). Esto implica que, cuando el déficit de agua sea en las épocas de crecimiento, las plantas deberán ser regadas considerando la humedad de agua en el suelo, la profundidad radicular y la capacidad de retención de agua en el suelo. (GARREN, 1988).
Un nivel de humedad uniforme y adecuado debe ser mantenido a través de las lluvias o de riego artificial en orden a asegurar un optimo de crecimiento y desarrollo. Los suplementos de agua tendrían que ser aplicados eficientemente con métodos de aspersión o goteo (GARREN, 1988).
Riego por goteo:
Consiste en la aplicación de 2 a 4 litros de agua por hora en la forma de gotas. El intervalo entre riego varia según el clima y el suelo. Pero la duración mas común es de 6 a 8 horas (WETTKE,1979).
Riego por microjet:
Los microjet son pequeños aspersores compuestos por una base y una boquilla, las cuales arrojan una serie de chorros que cubren superficies circulares. De esta manera se cubren con lluvia superficiales de 1 hasta 35 metros cuadrados lo que equivale a ocupar de 1 a 30 mm de agua por hora. Este método por aspersión es muy utilizado para proteger contra las heladas; sin embargo durante el período previo a la caída de pétalos favorece la Botritis. Cuando se utiliza este sistema se recomienda usar dos emisores por planta a una distancia de 40 cm por ambos lados de la hilera para evitar mojar la corona y tallos.
Fuente: TUA 1993R7881e (biblioteca san joaquin)
Al igual que el resto de los cultivos, los requerimientos de agua dependerán, por un lado, de un factor climático, donde están incluidos la temperatura del aire, el viento, la humedad relativa, la insolación, englobados dentro de la denominada evapotranspiración de referencia o Eto. Por otro lado, de características propias del cultivo, que se describen con un parámetro denominado coeficiente de cultivo o kc, el mismo se determina de manera experimental.
Aquí un ejemplo de Eto para una localidad determinada:
Cuadro 1 - Valores de Eto para el mes de enero, en la localidad de San Pedro.
Eto media para el periodo 1971-2005
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166,1 mm
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Eto para el 2005
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172,6 mm
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Eto más alta del periodo
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190,5 mm
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Eto más baja del periodo
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138 mm
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Datos suministrados por el Instituto de Clima y Agua del INTA Castelar
El riego está destinado a reponer las pérdidas por evaporación y transpiración, determinándose las necesidades de aplicación de agua a partir de los valores obtenidos de una bandeja de evaporación, valores que son propios de cada lugar, multiplicado por el coeficiente de cultivo o Kc, que para el arándano se ha estimado entre 0,7 y 1,0.
Estimaciones han demostrado que como norma general plantas de un año requieren
alrededor de 3.300 m3/ha/año, plantas de dos años tienen un requerimiento de 4.000
m3/ha/año y las de tres años, entre 4.250 y 4.300 m3/ha/año esta medida se calcula multiplicando el Kc del cultivo con el ETo del cultivo correspondiente a la zona donde se planta.
ETc = ETo * Kc