
- Época: durante el periodo de otoño-invierno se realizará la plantación sobre terreno ya laboreado.
- Diseño: la distancia entre sí será de 3 metros y entre 1.2 y 1.5 metros entre plantas. La densidad de plantación será de 2000-2500 plantas/hectárea.
- Cobertura: se aplicará una cobertura plástica para los primeros años de desarrollo y después se cubrirá con corteza de pino para mantener la humedad del suelo.
- Riego: el agua de riego debe ser de buena calidad sin presentar salinidad ni exceso de calcio, boro o cloro.
- Malas hierbas: para evitar la competencia hídrica y nutricional se deben eliminar las malas hierbas con herbicidas sistémicos o de contacto, o de forma mecánica, teniendo en cuenta que el sistema radicular del arándano es superficial.
Para su recolección será necesario el empleo de mano de obra especializada ya que se realiza de forma manual para el posterior envasado y embalaje.
Esta práctica se realiza de forma selectiva según los índices de madurez del fruto, que son el color y el tamaño, e implica que se realicen hasta 8 recolecciones por planta.
La recolección mecanizada se emplea cuando el fruto se destina a la industria.
El fruto madura durante el verano y se obtiene de media una producción de 1 kilo por metro cuadrado.